sábado, 16 de mayo de 2020

El ocaso de la aristocracia rusa

Como durante la fase más dura de la cuarentena leí "Llamadme Stalin" de Simon Sebag Montefiore, mi chico pensó en regalarme "El ocaso de la aristocracia rusa" de Douglas Smith.
El libro se centra en las tremendas historias de dos dinastías rusas- los Sheremmétecv y los Golitsin -que durante siglos habían estado en el centro del poder zarista.

Me ha quedado claro:

La pregunta que te planteas es si las culpas de los padres tienen que recaer en los hijos. Espontáneamente viene de decir NO pero...¿puede uno vivir de los privilegios heredados sin coste, sin vergüenza?
En Rusia la aristocracia odiaba cordialmente a todos los demás y el sentimiento era mutuo.
Los nobles tenía trabajadores pero les consideraban poco más que animales, como en la Edad Media Europea. El libro cuenta que un noble tenía a un criado que le limpiaba la cara con una esponja y tres personas para abrir la puerta. Se puede pensar que daba trabajo a muchas personas, pero lo importante de trabajar es que te paguen para vivir con dignidad,  crecer profesionalmente y  procurar una vida mejor a tus hijos. Esto no se daba. Ahora en muchos casos pasa lo mismo.
Con la revolución obligaron a los nobles a hacer trabajos modestos con la idea de humillarlos sin darse cuenta, ni los unos ni los otros que no hay empleos humillantes.
Puede parecer que recoger basura es un trabajo degradante pero he leído que en los años 90 del siglo pasado hubo una huelga de banqueros en Estados Unidos que duró una semana y de la que nadie se dio cuenta. En esa misma época hubo otra de barrenderos y en tres días la ciudad de New York estaba de rodillas. ¿Qué trabajo es más importante para la sociedad?
Si la aristocracia rusa se sentía humillada por limpiar la nieve de las aceras es porque despreciaban a los que lo hacían.

Sorprendente:

  • Entre los aristócratas rusos lo mismo había miembros a favor de la revolución como en contra.
  • Muchos nobles vieron venir los eventos pero nadie parece que hizo nada para evitarlo y eso que desde 1870 ya había claros signos de descontento traducidos en atentados.
  • En ambas familias hay personas que se fueron al exilio y tuvieron que trabajar de lo que fuera. No pudieron capitalizar sus conocimientos. Como ahora, ya puedes tener un título de lo que sea que terminas mileurista con un poco de suerte.
  • Los que se quedaron fueron perseguidos sin tregua sea por los comisarios del Soviet como por ciudadanos normales, les tenían un rencor incombustible.
  • ¿Cuánta gente había en Rusia? ¡Madre mía entre las primeras represiones zarista, la guerra contra Japón, luego la Primera Guerra Mundial, después la Guerra Civil, después las purgas Stalinistas y la Segunda Guerra Mundial, los campos de trabajo Gulag etc no tendría que quedar ni el tato!
  • Los aristócratas rusos fueron el objetivo de muchas persecuciones pero no fueron los únicos.  Fue horrible y un desperdicio de talento y de vidas terrible y escalofriante.
  • Las palabras recurrentes en este libro son: hambre, muerte y destrucción. 
  • Las "expropiaciones" a los propietarios nobles o no fueron robos puros y duros.
¡Qué cosas tiene estos rusos!
Es enternecedor poner cara a las personas que sufrieron tanto

Una anécdota curiosa que cuenta este libro es que en una ocasión un periodista americano fue a la casa de un jefazo del Soviet y estaba llena de las mejores cosas de los nobles rusos. Estaba viviendo con el postín de la aristocracia que había contribuido a destruir. Cuando el periodista le hizo un comentario al respecto el jefazo contestó que nada era suyo, que era del Estado. El autor lo considera demagogia. No estoy muy de acuerdo. No hay que olvidar que las purgas Stalinistas no dejaron títere con cabeza entre los jerarcas bolcheviques. Allí nadie tenía ninguna seguridad.
Los rusos creen que su país es único en el mundo. Parafraseando a Tolstoj, cada país es único a su manera. Los franceses hicieron su revolución, los italianos construyeron el primer imperio europeo, los griegos crearon la democracia, los alemanes hacen más daño que el granizo, incluso los portugueses con lo pequeño que es el país hizo de las suyas por el mundo.Cada uno tiene su "cosa". Los rusos lo han bordado.

Pelis sobre el tema

El Almirante.
Trata del Almirante Kolchak uno de los generales blancos. Lo pintan como un buen chico, con historia de amor en medio. Qué pena que no dicen nada que sus hordas violaban, mataban y mutilaban exactamente igual que los rojos. Las cosas tienen sus luces y sus sombras.





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